El Movimiento Por la Diversidad Sexual MUMS repudia los ataques violentos hacia personas trans, lesbianas y gays que han ocurrido durante el último mes en nuestro país. En este contexto, solidarizamos con los familiares y amigos de las víctimas. Asimismo, nos sumamos a su demanda de verdad y justicia hacia el Estado chileno.
Solo este fin de semana, un joven homosexual fue brutalmente agredido en un bus de la locomoción colectiva en Santiago. Además, una mujer trans fue asesinada a manos de su «pareja», encontrándose con señales de golpes y estrangulamiento en Puerto Montt.
Estos casos de odio se suman a un conjunto de ataques violentos que han terminado, algunos de ellos, con la muerte de personas. En otras palabras:
El 1 de enero, a un joven gay le apagaron cigarrillos en las manos, pisaron sus genitales y golpearon su cabeza con una piedra en Laguna Verde, Valparaíso.
El 5 de enero, un hombre gay fue quemado con agua caliente presentando quemaduras graves en Porvenir, Tierra del Fuego.
El 13 de febrero, una joven lesbiana fue víctima de una golpiza que le causó una fractura de cráneo y una hemorragia interna. Además, otra joven lesbiana fue secuestrada y torturada por su propia familia, involucrando elementos religiosos. Ambos casos en Santiago.
Finalmente, hubo dos asesinatos de mujeres trans, activistas de la Organización Libertad Trans Atacama en Copiapó.
Es importante destacar que estos ataques violentos no son eventos aislados, sino que constituyen el resultado de una estructura social machista, patriarcal y homolesbotransfóbica que debe ser atendida en forma integral. La situación es grave y demandamos acciones concretas por parte del Estado:
Exigimos una reforma sustancial a la Ley 20.609, conocida como Ley Antidiscriminación. Este cuerpo normativo no ha servido del todo para proteger a las personas LGTBI+ de la violencia y discriminación que sufren a diario, pues no se hace cargo de la promoción de los derechos y de las reparaciones, en caso de que se requiera, de las personas LGTBI+.
Asimismo, resulta de vital importancia contar con una institucionalidad que prevenga los casos de discriminación y promueva la diversidad como valor central dentro de la democracia. De forma complementaria, demandamos la urgencia de contar con una educación pública, no sexista y laica que promuevan los derechos de las personas LGBTI+ para nuestro pueblo.
En suma, exigimos al Estado hacerse cargo de sus compromisos internacionales adquiridos sobre los Derechos Humanos de la Diversidad Sexual, debido a que su omisión, lo hace cómplices de todos los ataques violentos y discriminatorios a personas lésbicas, trans, bisexuales y gays en Chile.
¡Exigimos justicia, reparación y promoción de la Diversidad Sexual, ahora!